En la industria de corte, los insertos y pastillas de carburo de tungsteno son elementales piezas para poder realizar trabajos de rectificación, moldeo, etc.
No obstante, cuando se utilizan pastillas que son de otros materiales como:
- Carburo cementado o metal duro: resistentes hasta 850 grados. Cuenta con una mezcla de cobalto y carburo.
- Cerámica: Suele utilizarse este material cuando se trata metales que generan virutas estáticas.
- Cermet: Combinación entre cerámica y metal.
- Nitruro de boro cúbico: de dureza extrema, pero por debajo del diamante. Aunque un poco frágil.
Es bastante común que por algunas circunstancias especiales se tengan que sustituir las pastillas e insertos.
Es claro que, esto sucede con todos los materiales. Incluso con las pastillas de carburo de tungsteno. Sin embargo, no es tan frecuente que suceda con este material debido a las propiedades que guarda. Que son:
- Alta resistencia.
- Dureza nivel 9 en la escala de Mohs (solo por debajo del diamante).
- Alto punto de fusión, siendo hasta los 3,422 º C.
- Alta densidad (más que el titanio o el plomo).
Entre las más destacables. Y, aún con esto, es necesario mantenerse al pendiente de cuando se requiera un cambio. Esto se debe hacer porque los trabajos puede que no se concreten de la forma deseada y, principalmente por la seguridad.
¿Sabes cómo identificar cuando se requiere el cambio? A continuación, te explicamos.
¿Cómo saber cuándo es el momento de cambiar las pastillas del torno?
Reconocer cuando un cambio es necesario es bastante sencillo, puesto que, son aspectos que se logran identificar a simple vista.
Normalmente se necesita realizar un cambio de pastillas e insertos cuando en estos se presentan:
Indicios de quemados y recalentado.
Los insertos se pueden observar que se han quemado cuando estos tienen manchas negras o grises en los bordes que tienen contacto con el metal que rectifican. Se pierde el color del inserto.
Se encuentran quebrados.
Es posible ver pequeñas grietas o puntos de fatiga que den indicios de que la pastilla o el injerto se ha quebrado.
Ten presente el revisarlos de forma constante para evitar trabajar con insertos quebrados. Puedes ocasionar un accidente, aunque lleves puesto todo el equipo necesario. Más vale prevenir.
Se despuntan o han perdido el filo.
Esto puede suceder por el uso constante. Hasta cierto punto es normal debido al desgaste generado a través del tiempo.
Cuando una pastilla o inserto pierde filo es fácil de percibir al momento de realizar trabajos. Estos se complican y el tiempo se puede hasta duplicar.
Si una pastilla se despunta se pierde por completo la efectividad de su uso. Para evitar estos inconvenientes es mejor optar por materiales resistentes como el carburo de tungsteno.
¿La mejor materia prima? Pastillas de carburo de tungsteno
Al principio mencionamos que todos los materiales son propensos a que les suceda lo que anteriormente mencionamos. No obstante, sí hay una gran diferencia entre los materiales que se utilizan en herramientas de corte.
Principalmente la vida útil de cada material. No negamos que materiales como el cermet o carburo cementado sean resistentes. Al contrario, son bastante útiles.
Sin embargo, cuando de resistencia y durabilidad se habla, es innegable que el carburo de tungsteno es la mejor materia prima para trabajar en la industria del corte.
Es claro que, puede llegar a presentar desgaste, pero para que esto suceda pasará más tiempo en comparación con los otros materiales.
Asimismo, las pastillas de carburo de tungsteno son las preferidas por muchos. Por ello su gran popularidad dentro de esta y otras industrias.
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