El carburo de tungsteno es un material casi tres veces más fuerte que el hierro, casi dos más que el plomo y virtualmente tanto como el oro. Se han presentado algunos casos de estafas en los que barras de tungsteno son presentadas como lingotes de oro.

Todo tipo de usos extraños explotan las cualidades únicas de el carburo de tungsteno que también se conoció como lapis ponderosa, piedra pesada en latín.

Los productos especiales de carburo de tungsteno también se pueden utilizar en los vibradores de nuestros celulares, las pesas para los aparejos de pesca, las bolas de los bolígrafos y las puntas de los dardos profesionales.

Las fábricas de herramientas utilizan mucho el carburo de tungsteno, por ser una de las sustancias más fuertes de el planeta.

El compuesto súper duro llamado carburo de tungsteno, cementado con cobalto, hacen una infinidad de piezas para taladros y herramientas para cortar que son utilizadas en las industrias aeronáuticas, automotrices y muchas otras más.

¿Cómo es que se le da forma a uno de los materiales más poderosos del planeta?

Hay que utilizar la única cosa que es más dura que el carburo de tungsteno, el diamante. Pero incluso utilizando herramientas especiales de corte que están compuestas de diamante, es una endemoniada batalla. En esta batalla no se ve humo o chispas. Todo lo que se escucha es el callado murmullo de los tornos y otras máquinas que hacen lo posible por extraer y darle forma a el carburo de tungsteno. 

Cada herramienta está metida en una caja que es a prueba de sonido y tiene un sofisticado sistema de enfriamiento que utiliza un tipo de aceite refrigerado. Hasta con tecnología de punta de este tipo puede tomar 10 minutos o hasta más cortar una sola pieza de un taladro.

A pesar de lo anterior, a medida que se usan más aleaciones avanzadas en la industria, la demanda por comprar herramientas súper fuertes, durables y precisas es mayor.

La mayoría del carburo de tungsteno que se saca de las minas se usa para hacer ese tipo de herramientas.